Nueva York – El reconocido narcotraficante ecuatoriano José Adolfo ‘Fito’ Macías compareció este lunes por primera vez ante una jueza de instrucción en Nueva York, donde se declaró «no culpable» de los cargos de narcotráfico y posesión de armas que se le imputan.
Macías enfrenta un total de siete cargos relacionados con tráfico de armas, tráfico de estupefacientes y conspiración vinculada a ambas actividades. Sin embargo, es importante destacar que no se incluyen cargos por asesinato. Todos los delitos están relacionados con el transporte de grandes cantidades de cocaína por parte de su organización, Los Choneros, destinada a ser distribuida en Estados Unidos, principalmente, por el cartel mexicano de Sinaloa.
Detalles de la Audiencia y Estado de Salud
Extraditado anoche desde Ecuador, en lo que representa el primer caso de este tipo entre el país suramericano y EE.UU., ‘Fito’ Macías, de 45 años, se mostró tranquilo durante la audiencia. Vestido con un pantalón caqui y una camiseta oscura, escuchó atentamente la lectura de cargos que le eran traducidos por una intérprete asignada por la corte.
A través de su abogado, Macías solicitó ser revisado por un médico, alegando sufrir de artritis, hipertensión y secuelas de varias esquirlas de bala en su cuerpo. La jueza de instrucción Vera Scandon accedió a esta petición.
Próximos Pasos en el Proceso Judicial
La jueza Scandon también aceptó la solicitud de ambas partes de retrasar al máximo el inicio del juicio, reconociendo la gran complejidad del caso. Tanto la defensa como la fiscalía necesitarán mucho tiempo para estudiar todos los documentos y reunir pruebas inculpatorias o exculpatorias.
La próxima audiencia está programada para el 19 de septiembre. En esa fecha, el acusado conocerá al juez que presidirá su caso y se ordenará la formación del jurado, a menos que en el ínterin se concrete una negociación de reconocimiento de culpabilidad, un acuerdo frecuente en casos de narcotráfico.
El abogado de ‘Fito’, Alexei Schacht, expresó en una breve declaración su satisfacción con la jueza, quien, según él, fue amable y comprendió los múltiples problemas médicos que padece su cliente.